¿SE PUEDE CAMBIAR EL KARMA?

 

 

El ruso S. N. Lazarev asegura que sí. Ha creado un sistema que, según afirma, le ha permitido limpiar su propio karma, superar un cáncer y ayudar a infinidad de personas a recuperarse de enfermedades crónicas o incurables.

Por Isabella Herranz. Artículo en revista “Más allá de la Ciencia”, n. 264, año XXIII (2011), páginas 56-61. (Sumario)

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“Era necesario encontrar en primer lugar las causas de los defectos kármicos, investigarlas, estudiarlas, estudiar la información y entregarse a la persona, pues yo podía sanar a cientos de personas haciéndoles comprender las causas de su enfermedad y el camino para salir de ella. Desde este momento me convertí en un investigador”, explica S. N. Lazarev en la introducción de su obra Diagnosis del karma. En la misma cuenta que ha dedicado tres décadas de su vida a la investigación en el campo de la bioenergética, tanto desde un trabajo práctico como mediante la interpretación filosófica del mundo y la confirmación convincente de las premisas básicas filosóficas y teóricas. Todo ello le ha permitido elaborar su “diagnosis del karma” (en realidad, sería más correcto decir “diagnóstico”).

UN SISTEMA BIOENERGÉTICO

Lazarev, de nacionalidad rusa y experto en bioenergética, era hasta ahora desconocido en nuestro país, pero su obra acaba de ser publicada en español y el hecho de que haya ayudado a miles de pacientes, incluyendo a muchos cuyas dolencias eran crónicas o parecían incurables, suscita suficiente interés como para que valga la pena investigar en qué consiste su método. Se trata de un sistema que tiene importantes implicaciones en diversos campos de la salud, ya que se relaciona con aspectos emocionales que habitualmente se pasan por alto a la hora de evaluar las enfermedades.

Lazarev llega a España avalado por un éxito sin precedentes en Rusia y Europa del Este. Sus libros recogen innumerables historias de pacientes a los que presuntamente ha curado con su método. También ofrecen información exhaustiva sobre procesos vitales del ser humano, así como sobre política, economía, religión, ciencia, etc. Debido a la creciente demanda, algunas de sus obras han sido traducidas al alemán, al polaco, al búlgaro y al rumano. Además de contar ya con  un primer libro en español, también hay disponible en nuestro idioma una larga entrevista grabada en DVD: “Este no es simplemente un libro nuevo con un tema que interesa hoy en día a muchas personas, sino la exposición del concepto original de la comprensión de las leyes del mundo espiritual, que rige el mundo material, ya el análisis de posibilidades para acceder al mundo de la bioenergética”, expresa en un momento de dicha entrevista refiriéndose a su libro.

En cuanto a término bioenergética es conveniente aclarar qué significa según la utilización del mismo que hace Lazarev. En principio, no tiene nada que ver con la bioenergética del psicoterapeuta Alexander Lowen, que es una técnica terapéutica de trabajo energético-corporal. En el sistema de Lazarev, bioenergética se asocia con el “karma” o “campo”. Así, por ejemplo, el estrés, los desacuerdos con algo o la añoranza del pasado, reforzados emocionalmente, se acumulan en el subconsciente y provocan graves enfermedades, ya que crean deformaciones de las estructuras de campo. Corrigiéndolas energéticamente se puede llegar a allanar estas estructuras, pero no siempre, y lo principal es que si la causa misma de la enfermedad no desaparece puede manifestarse en cualquier momento en otro lugar: “Las posibilidades enormes de la bioenergética no se dirigen a la comprensión del mundo que nos rodea, ni a la previsión y prevención de los problemas futuros, sino a la resolución de las tareas tácticas primitivas, momentáneas…  La salvación consiste en la búsqueda espiritual personal, en la comprensión de la responsabilidad que cada uno de nosotros tiene en el destino humano y en la vida del Universo”, explica Lazarev.

Buena parte de las investigaciones de Lazarev se inician en 1986, el año en el que conoció a V. B. Poliakov, director del Laboratorio de Mediciones Biodinámicas. Una de las ventajas de la escuela de Poliakov es que utilizaba un método de escritura que le permitía obtener un alto grado de exactitud tanto en el diagnóstico a distancia como en el diagnóstico rápido de contacto de los campos físicos del objeto.

En el método del trabajo de Poliakov, Lazarev encontró algo de gran utilidad: aprendió a diagnosticar y luego a intervenir en los “campos energéticos” del paciente, ya fuera trabajando con las manos o con el péndulo. Tras estudiar su “campo”, indica a sus pacientes lo que está mal y les envía a un cuarto cercano a rezar. Según afirma, durante la sesión se produce una intensificación de todos los procesos kármicos del paciente.

Lazarev defiende la idea de que la aspiración continua hacia la realización espiritual constituye la forma más eficaz de bloquear el karma

MODIFICAR LA CONDUCTA…

…para cambiar el destino y el karma

Por influencia de religiones orientales como el budismo, el hinduismo y el jainismo, los occidentales normalmente asociamos o interpretamos la palabra karma como una especie de ley cósmica de retribución, o de causa y efecto. Según esta interpretación, el karma explica las desventuras de la vida humana como una reacción a las acciones –buenas o malas- cometidas en vidas anteriores que no se recuerdan. En base a lo anterior, los humanos pueden elegir entre hacer el bien o el mal, pero no pueden librarse de las consecuencias derivadas de dichos actos.

Sin embargo, S. N. Lazarev propone otra interpretación del karma, que entiende como un mecanismo de recompensa de lo terrestre. En este sentido, karma y destino están juntos, y destino y carácter forman un conjunto indiferenciado, de modo que cambiando su carácter el hombre cambia su destino y su karma: “El carácter es nuestra conducta y reacciones ante el mundo que nos rodea. Cambiando nuestra actitud hacia el mundo, cambiamos nuestro carácter, el destino y el karma”.

Además, para Lazarev el karma no solo es individual, sino que también existe un karma colectivo: “El karma de la humanidad actual está tan enrarecido que es muy difícil sanarlo, pero se puede ‘cerrar’ el ciclo renunciando en cuerpo y alma a lo terrestre, es decir, comenzando con el desarrollo ético personal”, concluye.

LEYES DE LA ÉTICA

Como sanador y experto en bioenergética, Lazarev afirma que para vencer una enfermedad primero debemos sanar la causa, es decir, la energía negativa que produjo el desequilibrio. Fuertes sentimientos de odio, envidia, etcétera, pueden generar desequilibrios físicos que no abandonan nunca a la persona. Si no curamos la causa, lo negativo terminará por manifestarse. Y afirma que el origen de la enfermedad está vinculado a la infracción de las leyes de la ética, de ahí que el tratamiento debe estar dirigido a la comprensión de esas deformaciones para poder cambiar la concepción del mundo de la persona. Cuando esta comprende sus propios actos, puede influir sobre su espíritu y curarse: “Lo principal es comprender los errores, reconocerlos y a través de la confesión llegar a la armonía del Universo, a la comunión con lo Divino. La eliminación de la deformación de las estructuras de campo a través de la conciencia y la confesión producen unos resultados magnífiicos en la reconstitución de la salud de las personas a nivel físico, pero el tratamiento influye tanto en el cuerpo como en el alma”, explica.

CRÍTICAS

En aquellos sistemas que no están adscritos a una iglesia establecida o a un colectivo médico, es raro que no aparezcan críticos que los cuestionen. En este sentido, tampoco se escapa el “diagnóstico del karma” de Lazarev. Algunos han sugerido que se trata de una “ilusión”, otros que es un “engaño deliberado”, mientras que otros muchos aceptan sus palabras sobre Dios, la hermandad entre los hombres, la salud y el karma.

Dado que la mayoría de los foros o sitios web en los que se discute su trabajo están en ruso, no es fácil acceder a sus contenidos. No obstante, también hay algún foro internacional en inglés donde los seguidores del sanador han vertido interesantes opiniones. Un muchacho comenta, por ejemplo, que prácticamente en todas las librerías de Rusia hay un estante dedicado a los libros de Lazarev: “Enseña a permanecer con Dios en tu corazón en cualquier situación que travieses en la vida. Los rusos encuentran respuesta a las preguntas que les ocupan. Lo más importante es que su sistema funciona o, al menos, ayuda”, explica.

En relación con la gran popularidad de los libros de Lazarev cabe señalar, no obstante, que ha influido decisivamente un factor socio político: a partir de 1990, los rusos empezaron a acceder a libros de corte esotérico, que hasta entonces habían estado prohibidos por el régimen comunista. Y si no estaban prohibidos, al menos existía un vacío total. Lazarev empezó a publicar precisamente entonces y se hizo muy popular.

También la Iglesia ortodoxa rusa se ha pronunciado en relación con los trabajos de Lazarev, ya que el autor no solo está influido por la doctrina budista, sino también por el cristianismo, y uno de sus temas fundamentales es el arrepentimiento. El sacerdote ortodoxo Andrey Logrus, por ejemplo, opina que Lazarev, al igual que otros muchos, posee habilidades extrasensoriales y las utiliza: “Las llama el ‘campo’ o ‘karma’ (algo muy diferente de su significado en el hinduismo). Utliza su campo como instrumento mediante el cual interviene en el campo de su paciente e intenta corregirlo. No demuestra si sus correcciones son auténticas o adecuadas. Parte de su experiencia subjetiva y asegura al lector que su experiencia es correcta. Pero no explica de dónde le viene tanta confianza. Solo insinúa que creamos y confiemos en él”.

“LA MALDAD ESTÁ EN NOSOTROS MISMOS”

A tenor de la popularidad que han alcanzado sus libros, es obvio que son muchos los que lo hacen y aseguran haberse sentido ayudados por Lazarev. Otra persona que conoce a fondo su obra apunta que “muchos puntos de sus libros tocan cosas que todos conocemos bien: que todo está conectado, que la energía negativa que sentimos hacia Universo regresa para mordernos, que todo lo que necesitamos es amor…”. Y comenta también que tiene un ejemplo de esto en su propia familia y que el libro de Lazarev le llegó justo en el momento adecuado para permitirle comprender mejor a esa persona e intentar algo para ayudarla. “¿No es maravilloso que el Universo te envíe justo lo que necesitas en el momento adecuado?”, expresa.

Para este reportaje también hemos entrevistado a una persona que reside en España y que prefiere mantener su anonimato. Conoce muy bien la obra de Lazarev y asegura que le ha sido de gran ayuda (ver el recuadro abajo). Al final, lo que quizá importe más sea eso precisamente: que haya tantas personas que se sientan agradecidas por la ayuda que aseguran haber recibido de este presunto sanador. Esto, sin duda, hace feliz al propio Lazarev, que concluye diciendo: “Yo sería feliz si la persona, después de leer este libro, comprendiera lo alterada que está nuestra asimilación del mundo y qué es lo que debe cambiar en su vida para evitar nuevos problemas. Ahora lo principal es, por lo menos, pararse ‘al borde del abismo’. Una persona puede bloquear su karma mediante una alimentación y conducta correctas, y es lo primero que hay que hacer, pues la maldad con la que nos encontramos día a día está dentro de nosotros mismos”.

ENTREVISTA A SVITLANA S., MÉDICO:

“He visto cómo mucha gente se ha curado practicando el perdón y cambiando su visión del mundo”

Svitlana S. es una ucrainiana doctorada en Medicina. Lleva varios años trabajando en un hospital de Asturias como médico de cabecera. Al verse obligada a abandonar su país emigró a Venezuela, donde, tras nueve años de residencia, la política de extranjería de Chávez la obligó a emigrar de nuevo y se vino a España. En este duro proceso le ha sido de gran ayuda la obra de Lazarev. Sobre su experiencia nos habla ampliamente en esta entrevista.

- ¿Cómo le llegó la información sobre el trabajo de Lazarev?

- De forma muy circunstancial, a través de una amiga de mi madre que es directora de una escuela. Ella es matemática, pero siempre le interesó la filosofía. Habló a mi madre sobre Lazarev, yo escuché su testimonio y me interesó.

Tomé nota y compré sus primeros cinco libros en 1998. Los leí de un tirón. Mi madre tardó diez años en acercarse a su obra y ahora la entiende muy bien, pero en aquella época no entendía nada.

- ¿De qué manera le afectaron aquellas lecturas?

- Este hombre no está diciendo nada nuevo, está diciendo cosas que ya decían los sabios hace dos mil años, solo que el modo en que lo dice y cómo lo enseña es totalmente distinto. Yo diría que es más penetrante. Lazarev escribe para todo el mundo, creyentes y no creyentes, gente docta y gente menos culta. A mí su obra me permitió abrirme al mundo, mostrarme más alegre, más confiada, más pacífica. Digamos que el cambio en mi caso se produjo en relación con una mayor armonía conmigo misma. Pero una cosa es leer su obra y otra poner en práctica sus enseñanzas. Mucha gente no quiere modificar su visión del mundo y sigue en sus trece hasta que se muere.

- ¿Podría resaltar algún aspecto de la enseñanza de Lazarev que tenga algo de novedoso y valga la pena destacar?

- El hecho de que aporte un punto de vista diferente a la hora de exponer su trabajo es lo que me parece especialmente novedoso, aunque exponga cosas antiguas. En cuestiones de religión, por ejemplo, nos suelen decir que aceptemos incluso lo que no entendemos, pero Lazarev nos explica con toda claridad el porqué de muchas cosas que no entendíamos. Aclara también por qué nuestros políticos toman a veces decisiones que nos parecen extrañas. Nos explica muchos porqués, eso me parece esencial porque al hacerlo nos redescubre cosas que estaban ya escritas en la Biblia, por ejemplo.

- ¿Cómo definiría a Lazarev, como un filósofo o como un sanador?

- Es un filósofo y un psicólogo. La palabra sanador no le define tan bien porque nosotros la asociamos con médico que prescribe algo. El sanador te sana, pero Lazarev, en cambio, te “pone en marcha”. Lo que hagas después depende de ti. Lo bueno es que te explica cosas y empiezas a cambiar tu visión del mundo.

- Usted hablaba de sentirse más serena y alegre, pero ¿puede concretar algo que explique la manera en que esta enseñanza ha afectado a su vida?

- Simplemente puedo decir que cuando uno empieza a practicar de verdad este sistema, las cosas se suceden a tu alrededor mágicamente; no te das cuenta, pero cuando miras atrás lo ves. Es, como nosotros decimos, como si estuviéramos “bajo el favor de Dios”. Me parece importante tener conciencia de que en cada instante Dios está con nosotros. No es cuestión de ir a la iglesia, cualquiera que sea el credo que tengamos, si es que tenemos alguno. Hay personas que piensan que las puertas están cerradas, que todo son problemas, pero cuando adoptas esta visión del mundo es como si de repente las puertas se abrieran y recibieras ayuda de todas partes. Cuando te pones en armonía con el mundo es como si las cosas se resolvieran. Pero, repito, no es fácil ponerse en armonía.

- ¿Daría algún consejo a las personas que quieran acercarse al trabajo de Lazarev?

- Bueno, todos los consejos ya están dichos en sus libros. Por mi propia experiencia puedo decir que los cambios no se suceden de la noche a la mañana; sé de gente que ha tardado una década o más para transformarse, pero lo han conseguido. Cuando uno está preparado para el cambio en su carácter, sus costumbres, su manera de actuar y relacionarse, etcétera, el cambio se produce. A veces te mueves muy poco, pero es suficiente para la transformación.

La gente se cuestiona si eso es suficiente para sanarse o para cualquier otra cosa que precisen, pero quienes creyeron afirman que así es. He visto cómo mucha gente se ha curado o aliviado solo practicando el perdón y cambiando su visión del mundo. La información de Lazarev está viva y actúa de verdad. Cuando se mueven muchas capas de tu karma se pueden sanar muchas cosas. A veces pasan cosas milagrosas, se depuran muchos errores que acarreamos y que debemos dejar atrás.

PREGUNTAS CON RESPUESTA

Los consejos de Lazarev

S. N. Lazarev ha ofrecido una serie de consejos en respuesta a las preguntas que muchos de sus pacientes le han hecho. En primer lugar, les ha dicho lo que acostumbra a decir todo maestro que se precie: “Si quieres ayudarte, no dependas de mi”. Y seguidamente aporta una serie de reglas:

Primera regla:

- Pon tu vida en orden, elimina las sobrecargas, regula tu ingesta y elimina todo lo que suponga mucha energía.

- Libérate de los problemas, el trabajo, la familia, las relaciones y las preocupaciones generales.

- Sacrifícate y haz donaciones

- Aliméntate con frugalidad.

Segunda regla:

- Reduce tu dependencia de los deseos, la estabilidad, el bienestar, las esperanzas y los objetivos.

- Aprende a aceptar las situaciones difíciles, no solo de forma superficial sino profundamente. ¿Qué supone esto? Supone seguir amando a Dios cuando la felicidad humana se ha perdido. Es un reflejo de la aspiración de Dios cuando el dolor espiritual y el físico devienen insoportables. Es rechazar todo lo que impide el amor: el odio, la ofensa, la culpa y el desánimo. Es ver la voluntad de Dios en todo lo que hay alrededor nuestro. En el nivel divino todos somos perdonados por el pasado y salvados en el futuro.

- Mis consejos no servirán de nada a menos que aprendas a aceptar una situación difícil y perdones y promuevas el amor.

Puedes leer millones de respuestas y consejos, pero no entenderás nada. Parece que entendemos por la cabeza, el pensamiento y la conciencia, pero lo cierto es que comprendemos por la vía del sentimiento. Si nuestra alma no acepta, nuestra cabeza nunca entenderá.

- Sin dejar de amar a Dios, revisa los principales acontecimientos de tu vida una y otra vez. Concéntrate en el amor. Hazlo sin reservas, aislándote de todo a tu alrededor. Para que te inspire la divinidad, tu mente debe pararse.

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